Acho es un pastor alemán que llegó al refugio el 3 de julio de 2025. Ese mismo día, de madrugada, fue abandonado atado a un contenedor de basura. Allí estuvo durante toda la noche hasta que le encontramos por la mañana. Desde el primer instante vimos que se trataba de un perro muy bueno. Estaba lleno de parásitos tanto internos como externos, y con el pelo desaliñado y sucio. Desde que está en el refugio os podemos decir que Acho es un trozo de pan. Es un perro muy tranquilo y muy cariñoso que pasea genial con la correa y que no guarda rencor. Es un perro de unos siete años con esa serenidad típica que te da la edad.